Sentados sobre la cama de una habitación de hotel, esta vez con un contexto diferente al de siempre. Hoy estamos aquí para lamer nuestras heridas (esa era la idea), hoy no hay deseo, hoy no hay pasión, o quizá si pero una pasión tan fría que debería de tener un nombre y dedicarle canciones de desamor. Sentada sobre la orilla de la cama miras al piso, sentado sobre la orilla de la cama miro hacia la puerta. Solo silencio entre los dos, pero no silencio incomodo, ese ya lo superamos hace mucho, ahora podemos estar en silencio por mucho rato y no pasa nada. No hay tiempo de tratar de adivinar lo que piensa el otro pues estamos sumergidos en nuestros nudos. Pasa el tiempo mas lento de lo que solía pasar, antes lo devorabamos y nunca era suficiente. De repente algo ocurre y volteamos despacio a vernos, nos regalamos una tímida y rara sonrisa, o eso parece, pues los labios dibujan alegría pero los ojos asoman tristeza. Ambos sabemos que fue por puro compromiso pero no decimos nada. Con solo...
Hoy mientras viajaba al trabajo, alguien en el radio empezó a leer un fragmento de un libro, lo que leía, inmediatamente lo reconocí como tus palabras. Después dijo descanse en paz J. D Salinger y comenzo la canción Mad World de Gary Jules . Así me entere de tu muerte ocurrida el día miércoles. A veces en días de des esperanza yo también quisiera solo ser un guardián en un campo de centeno. Gracias.